Descripción
Esta obra de gran formato retrata un paisaje de viñedo en Villena, capturado con la fuerza expresiva de la espátula. La textura se convierte en protagonista: cada trazo grueso revela capas de color y materia que evocan el carácter áspero y auténtico del terreno.
En primer plano, se extienden las filas del viñedo con sus hojas teñidas de un rojo profundo, color vino tinto, que vibran sobre el lienzo como brasas otoñales. La técnica de espátula aporta volumen y relieve a las hojas.
El suelo del viñedo, representado con tonos ocres, terrosos y grises azulados, muestra una textura pedregosa y seca, con detalles que sugieren la tierra árida y las piedras características de la región alicantina. El uso gestual de la espátula refuerza la sensación táctil del terreno y su resistencia.
Al fondo, suavemente integrada, se alza una colina de montaña con una curva sutil, que equilibra la composición y añade profundidad al paisaje. La montaña actúa como un telón natural que enmarca la escena, envuelta en una atmósfera cálida y serena que evoca la luz dorada de última hora de la tarde.
La obra transmite la belleza silvestre del paisaje mediterráneo, su dureza y su nobleza, a través de una paleta rica en contrastes y una ejecución que combina energía y contemplación.
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