Descripción
Impresionantes e imponentes, majestuosos, mágicos y gigantes. Son los ficus de hoja grande. Especialmente diseñados para ser trepados por niños, construir cabañas sobre ellos, llegar hasta la rama más alta… Sus raíces parecen serpientes que cuelgan y se alborotan para alcanzar la tierra y así crecer. Tenemos la suerte de poder encontrar estos árboles centenarios en varios espacios de la ciudad de Alicante, y algunos, ¡hasta de haberlos podido trepar!
En la ilustración se aprecian un ejemplar de los del Parque de Canalejas. La exageración de saturación de los colores vivos y cálidos en contraste con los azules y verdes oscuros nos muestran el especial filtro de luz que ofrece esta variedad, otorgando sombrajes de postín, densos. Y cómo la increíble geometría de sus troncos, raíces sobre la tierra, muestra en sus cambiantes superficies los reflejos de los pocos rayos que reciben. Una textura maravillosa y de fantasía.
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